Los imprevistos hacen parte de la vida de las personas y, aparentemente, también de los festivales. Cuando, hace precisamente un año, cerramos la edición del FICSE 2023 y nos despedimos (del público, competidores, de los otros participantes y colaboradores) hasta el FICSE 2024, no podríamos adivinar que un año después, al final, en lugar de pisar de nuevo aquel que era, desde 2015, nuestro escenario, estaríamos, en otro registro, produciendo una edición online.
Edición online, para nosotros, es sinónimo o resultado de “situación imprevista”. Así sucedió en 2021, cuando la pandemia de Covid-19 interrumpió y condicionó la vida de todo un planeta. En aquel momento, en cierto modo, fuimos forzados a seguir la tendencia universal de los festivales como el nuestro y buscar la alternativa online, donde el vídeo con la interpretación del cantante tomó el lugar de la canción en el escenario.
En 2024, por motivos logísticos imposibles de superar con tiempo suficiente, el FICSE no pudo realizar la habitual edición en vivo que todos esperábamos y deseábamos en la despedida del año anterior.
Ante semejante circunstancia y en la perspectiva de no quedarnos un año sin actividad en el festival, decidimos volver a la referida alternativa online. La prueba de vida de los festivales se cumple con su realización. El terreno natural de los festivales es el escenario, pero si este año no hemos podido traer a Portugal a los aproximadamente 200 participantes que movíamos anualmente, fuimos nosotros a su encuentro en esta versión con vídeos que, hay que reconocerlo, también es del agrado de muchos concursantes porque les permite competir en la distancia.
Y dejemos que los números hablen: si en nuestra edición especial online de 2021 ya había alcanzado cifras interesantes, a saber: 71 competidores / 93 vídeos / 16 países representados, esta vez se superaron las esas cifras anteriores: 89 competidores / 147 vídeos / 20 países representados. Son cifras que superan a certámenes similares promovidos por otros festivales internacionales.
Una conclusión que se puede sacar, aunque parezca inmodesta, es que nuestro festival está fuertemente implantado en el tejido europeo donde se desarrollan los festivales como el nuestro. La interactividad y colaboraciones que festivales extranjeros solicitan regularmente al FICSE revelan el prestigio, unánimemente considerado, que hemos alcanzado.
Un apunte final: cuando visitamos otros festivales en sus tierras, normalmente como jurados, podemos observar (admirados o quizás no...) el apoyo y los amplios equipos que ayudan a organizar las ediciones de estos festivales hermanos. Y no podemos evitar compararlo con la realidad del FICSE, donde es un mini-equipo el que monta una máquina con un número cada vez mayor de componentes y además cada vez más lubricada. Con la particularidad de que este mini-equipo es el mismo desde la primera hora, en 2015.
Que este orgullo nos sea perdonado!
Nuno Figueira
Director del Festival